18 d’agost 2008

Distànciaa.



I mentres parle amb tu tanque els ulls per a imaginar tot alló que dius.. per imaginar eixe petó, per imaginar eixa abraçada, per imaginar eixe somriure i sentir com t'apropes a mi..

La imaginació es alló que ara he de fer servir...

Et trobe a faltar....

17 d’agost 2008

trobar-te a faltar es el pitjor castig que em podria caurer del deus..
i no saver que ha de passar es pitjor encara..
... 4 dies..

15 d’agost 2008

4 dies.



4 dies que pareixen una vida,




4 dies intensos amb milers de coses que quedaran gravades.





4 dies amb algú que es part intensa en la meua vida,




4 dies i un paral·lelisme,




4 dies,




eixos 4 dies que ara em fan plorar al tenir-te lluny d’aquí,




4 dies que em fan mal en la distància,




4 dies que ens han unit més si calia,




4 dies que han fet que et conega més encara.




4 dies que m’han fet reviscolar,




4 dies que potser mai no oblidi,




4 dies vampirescs,




4 dies i somriures,




4 dies i llàgrimes,




4 dies i carícies,




4 dies i abraçades,




4 dies i petons,




4 dies i tu.




Quant donen de sí quatre dies.




Uns segons fan que algú estigui segur de moltes coses, imagina quatre dies fan.




4 dies i records,




4 dies i sustos,




4 dies i espasmos,




4 dies i sinkopes,




4 cucu dies,




4 dies que han passat prompte pero que han canviat la meua vida,




4 dies amb tu, Marc.




4 dies i t’estimo.




4 dies i així ho faré.







07 d’agost 2008

Coso texto.

Y mientras se habría paso por ese camino lleno de luces, llegó a la conclusión de que ese era su lugar, solo se encontraba una úniKa cosa: felicidad.
Se sentía a gusto rodeada de personas que no miraban como eras, simplemente te aceptaban por ser persona.
Entonces pensó que aquello era lo úniKo que realmente quería. No importaba la edad, ni importaba tu ideología, tampoco lo hacía si eras alto o bajo, gordo o delgado, mujer o hombre, importabas por tu interior. Por fin encontró el lugar al que correspondía. Esas eran sus personas, con ellas quería pasar sus días, rodeada de personas que buscaban personas.


Entonces se dio cuenta de lo que realmente había ganado por haberlos conocido.

Tal vez os resulte cutre, lo siento, pero sólo yo sé lo que he ganado al teneros a mi lado. Gentuaza, sois i seréis grandes entre los grandes, sois esas personas que quedan grabadas para siempre. La gentuaza llegará lejos, i cuando cuente a alguien como sois tendrá envidia, esa envidia sana o insana segúa la gente, de no tener a personas con las que poder decir: he pasado el mejor año de mi vida.

Gracias.

Golpe de pecho una i mil veces a vuestro lado, pero siempre a vuestro lado.

05 d’agost 2008

Abraçada.

Abrazate a mi como si el viento te fuera a separar de mi lado.por nada del mundo flojees tus fuerzas, pegate cada vez más.Abrazame, escucha mi corazón mientras el viento nos intenta separar.abrazate i verás como no puede, i aunque no cese tu y yo permaneceremos juntos, a pesar de su fuerza, escucha mi corazon, late por ti, cada segundo me das vida, mientras me abrazas i lo escuchas, no lo ves? cada vez va mas fuerte, no es por el miedo, si no por tenerte cerca, no te separes, no te vayas o el corazón dejará de latir, abrazate, el viento poco a poco va parando, y comienza a anochecer, no te separes, pasaremos la noche abrazados, lo ultimo que vere en mi dia seras tu, te encontrare en los sueños i pronto al amanecer despertare i te vere a mi lado, de nuevo. volveras a escuchar mi corazon i cada latido dira tu nombre en el rocio de la mañana, cada latido es por ti, por la distancia que nos separa i que nos ha separado, pronto latira con mas fuerza, solo mirame a los ojos mientras lo escuchas latir, abrazame, no te separes de mi, quiero pasar una eternidad a tu lado, y una eternidad es mucho tiempo, abrazame dejame sin aire con tus fuerzas, estremece mi cuerpo con un solo abrazo, abrazame, tal vez hoy sea la ultima vez que te vea,abrazame i yo lo haré con todas mis fuerzas, para que hoy sea interminable i tu y yo podamos estar juntos por siempre. abrazame y no digas nada, solo abrazame. pronto seremos uno. realmente creo que este abrazo puede ser eterno cuando empiezo a notar el calor de su cuerpo, en un instante se desvanece entre mis brazos, i lo que pensaba que era mi eternidad se convirtio en mi infierno. Pronto todo llegaría a su fin ese abrazo deseado era solo producto de la imaginación cuando de golpe acompañado por un "Bon Dia amor meu" escuche eso que hacia tiempo no escuchaba." T'estime". I al abrir los ojos vi que todo fue una pesadilla i que seguia abrazada a el, por siempre, por nuestra eternidad.

04 d’agost 2008

Te fallé.

Pensando i rebuscando en los surcos de la memoria he encontrado muchos momentos en los que te fallé i sobretodo he encontrado el motivo por el que te aleje de mi lado completamente. Ahora solo veo que nada es como antes, somos dos desconocidos, a ti te gusta jugar a joder y a mi me jode que jueguen a eso.

Eras un amigo, pronto pasaste a ser la persona más especial, y luego por el amor a otra persona te aparte, te aparte… No podía ser todo lo que quería, no podía querer todo lo que era, pero solo se que te aparte, te aparté i me duele…

Creas que no me gustaba más antes cuando después de una de esas situaciones incómodas nos mirábamos i nos besábamos sin mediar más palabra.

No se si te echo de menos o tal vez solo me gustaría volver a aquel entonces para no enfadarme i desear alejarte del todo, pero quiero volver a mirarte i con un beso un mordisco i algo más zanjar los temas mas peliagudos.

Echo de menos tus abrazos, tus muñeca i tus cosas.

Echo en falta el amor que aunque no demostrabas sabía que sentías.. tantas cosas…

Pero te aparté…

Te fallé

I me volví una completa cría que no podía conversar contigo sin querer tener la razón en todo.

Te fallé…

Te extrañaré

Te estimaré.

01 d’agost 2008

Salvador Allende.

Con profunda emoción les hablo desde esta improvisada tribuna por medio de estos deficientes amplificadores. ¡Qué significativa es -más que las palabras- la presencia del pueblo de Santiago que, interpretando a la inmensa mayoría de los chilenos, se congrega para reafirmar la victoria que alcanzamos limpiamiento el día de hoy, victoria que abre un camino nuevo para la patria, y cuyo principal actor es el pueblo de Chile aquí congregado! ¡Qué extraordinariamente significativo es que pueda yo dirigirme al pueblo de Chile y al pueblo de Santiago desde la Federación de Estudiantes! Esto posee un valor y un significado muy altos.
Nunca un candidato triunfante por la voluntad y el sacrificio del pueblo usó una tribuna que tuviera mayor trascendencia. Porque todos lo sabemos: la juventud de la patria fue vanguardia en esta gran batalla, que no fue la lucha de un hombre, sino la lucha de un pueblo; ella es la victoria de Chile alcanzada limpiamente esta tarde.
Yo les pido a ustedes que comprendan que soy tan sólo un hombre, con todas las flaquezas y debilidades que tiene un hombre; y si pude soportar -porque cumplía una tarea- la derrota de ayer, hoy sin soberbia y sin espíritu de venganza, acepto este triunfo que nada tiene de personal y que se lo debo a la unidad de los partidos populares, a las fuerzas sociales que han estado junto a nosotros. Se lo debo a radicales, socialistas, comunistas, socialdemócratas, a gentes del MAPU y del API, y a miles de independientes. Se lo debo al hombre anónimo y sacrificado de la patria; se lo debo a la humilde mujer de nuestra tierra. Le debo este triunfo al pueblo de Chile, que entrará conmigo a La Moneda el 4 de noviembre.
La victoria alcanzada por ustedes tiene una honda significación nacional. Desde aquí declaro, solemnemente, que respetaré los derechos de todos los chilenos. Pero también declaro, y quiero que lo sepan definitivamente, que al llegar a La Moneda, y siendo el pueblo gobierno, cumpliremos el compromiso histórico que hemos contraído, de convertir en realidad el programa de la Unidad Popular.
Lo dije: No tenemos ni podríamos tener ningún propósito pequeño de venganza. Sería disminuir la victoria alcanzada. Pero, si no tenemos un propósito pequeño de venganza, tampoco, de ninguna manera, vamos a claudicar, a comerciar el programa de la Unidad Popular, que fue la bandera del primer gobierno auténticamente democrático, popular, nacional y revolucionario de la historia de Chile.
Dije, y debo repetirlo: Si la victoria no era fácil, difícil será consolidar nuestro triunfo y construir la nueva sociedad, la nueva convivencia social, la nueva moral y la nueva patria.
Pero yo sé que ustedes, que hicieron posible que el pueblo sea mañana Gobierno, tendrán la responsabilidad histórica de realizar lo que Chile anhela para convertir a nuestra patria en un país señero en el progreso, en la justicia social, en los derechos de cada hombre, de cada mujer, de cada joven de nuestra tierra.
Hemos triunfado para derrotar definitivamente la explotación imperialista, para terminar con los monopolios, para hacer una seria y profunda reforma agraria, para controlar el comercio de importación y exportación, para nacionalizar, en fin, el crédito, pilares todos que harán factible el progreso de Chile, creando el capital social que impulsará nuestro desarrollo.
Por eso, esta noche, que pertenece a la Historia, en este momento de júbilo, yo expreso mi emocionado reconocimiento a los hombres y mujeres, a los militantes de los partidos populares e integrantes de las fuerzas sociales que hicieron posible esta victoria que tiene proyecciones más allá de las fronteras de la propia patria.
Para los que están en la pampa o en la estepa, para los que me escuchan en el litoral, para los que laboran en la precordillera, para la simple dueña de casa, para el catedrático universitario, para el joven estudiante, el pequeño comerciante o industrial, para el hombre y la mujer de Chile, para el joven de la tierra nuestra, para todos ellos, el compromiso que yo contraigo ante mi conciencia y ante el pueblo -actor fundamental de esta victoria- es ser auténticamente leal en la gran tarea común y colectiva. Lo he dicho: mi único anhelo es ser para ustedes el Compañero Presidente.
Han sido el hombre anónimo y la ignorada mujer de Chile los que han hecho posible este hecho social trascendental Miles y miles de chilenos sembraron su dolor y su esperanza en esta hora que al pueblo pertenece. Y desde otras fronteras, desde otros países, se mira con satisfacción profunda la victoria alcanzada. Chile abre un camino que otros pueblos de América y del mundo podrán seguir. La fuerza vital de la unidad romperá los diques de las dictaduras y abrirá el cauce para que los pueblos puedan ser libres y puedan construir su propio destino.
Somos lo suficientemente responsables para comprender que cada país y cada nación tiene sus propios problemas, su propia historia y su propia realidad. Y frente a esa realidad serán los dirigentes políticos de esos pueblos los que adecuarán la táctica que deberá adoptarse. Nosotros sólo queremos tener las mejores relaciones políticas, culturales, económicas, con todos los países del mundo. Sólo pedimos que respeten -tendrá que ser así- el derecho del pueblo de Chile a haberse dado el gobierno de la Unidad Popular.
Somos y seremos respetuosos de la autodeterminación y de la no intervención. Ello no significará acallar nuestra adhesión solidaria con los pueblos que luchan por su independencia económica y por dignificar la vida del hombre en los distintos continentes.
Sólo quiero señalar ante la historia el hecho trascendental que ustedes han realizado, derrotando la soberbia del dinero, a presión y amenaza; la información deformada, la campaña
terror, de la insidia y la maldad. Cuando un pueblo ha sido capaz de esto, será capaz también de comprender que sólo trabajando más y produciendo más podremos hacer que Chile progrese Y que el hombre y la mujer de nuestra tierra, la pareja humana, tengan derecho auténtico al trabajo, a la vivienda, a la salud, a la educación, al descanso, a la cultura y a la recreación.
Pondremos toda la fuerza creadora del pueblo en tensión para hacer posible estas metas humanas que se ha trazado el programa de la Unidad Popular.
Juntos, con el esfuerzo de ustedes, vamos a realizar los cambios que Chile reclama y necesita. Vamos a hacer un gobierno revolucionario.
La revolución no implica destruir, sino construir; no implica arrasar, sino edificar; y el pueblo de Chile está preparado para esa gran tarea en esta hora trascendente de nuestra vida.
Compañeras y compañeros, amigas y amigos:
¡Cómo hubiera deseado que los medios materiales de comunicación me hubieran permitido hablar más largamente con ustedes, y que cada uno hubiera oído mis palabras, húmedas de emoción, pero al mismo tiempo firmes en la convicción de la gran responsabilidad que todos tenemos y que yo asumo plenamente!
Yo les pido que esta manifestación sin precedentes se convierta en la demostración de la conciencia de un pueblo.
Ustedes se retirarán a sus casas sin que haya el menor asomo de una provocación y sin dejarse provocar. El pueblo sabe que sus problemas no se solucionan rompiendo vidrios o golpeando un automóvil. Y aquellos que dijeron que el día de mañana los disturbios iban a caracterizar nuestra victoria, se encontrarán con la conciencia y la responsabilidad de ustedes. Irán a su trabajo mañana o el lunes, alegres y cantando; cantando la victoria tan legítimamente alcanzada, y cantando al futuro. Con las manos callosas del pueblo, las tiernas manos de la mujer y las risas del niño, haremos posible la gran tarea que sólo un pueblo consciente y disciplinado podrá realizar.
América Latina y más allá de la frontera de nuestro pueblo, miran el mañana nuestro. Yo tengo plena fe en que seremos lo suficientemente fuertes, lo suficientemente serenos y fuertes, para abrir el camino venturoso hacia una vida distinta y mejor; para empezar a caminar por las esperanzadas alamedas del socialismo, que el pueblo de Chile con sus propias manos va a construir.
Reitero mi reconocimiento agradecido a los militantes de la Unidad Popular; a los que integran los Partidos Radical, Comunista, Socialista, Social Demócrata, MAPU y API; y a los miles de independientes de izquierda que estuvieron con nosotros. Expreso mi afecto y también mi reconocimiento agradecido a los compañeros dirigentes de esos partidos, que por sobre las fronteras de sus propias colectividades hicieron posible la fortaleza de esta unidad que el pueblo hizo suya. Y porque el pueblo la hizo suya ha sido posible la victoria, que es la victoria del pueblo.
El hecho de que estemos esperanzados y felices no significa que vayamos nosotros a descuidar la vigilancia: El pueblo, este fin de semana, tomará por el talle a la patria y bailaremos desde Arica a Magallanes, y desde la cordillera al mar, una gran cueca, como símbolo de la alegría sana de nuestra victoria.
Pero al mismo tiempo, mantendremos nuestros comités de acción popular, en actitud vigilante, en actitud responsable, para estar dispuestos a responder a un llamado -si es necesario- que haga el comando de la Unidad Popular. Llamado para que los comités de empresas, de fábricas, de hospitales, en las juntas de vecinos y en los barrios y en las poblaciones proletarias vayan estudiando los problemas y las soluciones; porque presurosamente tendremos que poner en marcha el país. Yo tengo fe, profunda fe, en la honradez, en la conducta heroica de cada hombre y de cada mujer que hizo posible esta victoria.
Vamos trabajar más. Vamos a producir más.
Pero trabajaremos más para la familia chilena, para el pueblo y para Chile, con orgullo de chilenos y con la convicción de que estamos realizando una grande y maravillosa tarea histórica.
¡Cómo siento en lo íntimo de mi fibra de hombre, cómo siento en las profundidades humanas de mi condición de luchador, lo que cada uno de ustedes me entrega! Esto que hoy germina es una larga jornada. Yo sólo tomo en mis manos la antorcha que encendieron los que antes que nosotros lucharon Junto al pueblo y por el pueblo.
Este triunfo debemos tributarlo en homenaje a los que cayeron en las luchas sociales y regaron con su sangre la fértil semilla de la revolución chilena que vamos a realizar.
Quiero antes de terminar, y es honesto hacerlo así, reconocer que el gobierno entregó las cifras y los datos de acuerdo con los resultados electorales. Quiero reconocer que el jefe de plaza, general Camilo Valenzuela, autorizó este acto; acto multitudinario, en la convicción y la certeza que yo le diera de que el pueblo se congregaría, como está aquí, en actitud responsable sabiendo que ha conquistado el derecho a ser respetado; respetado en su vida y respetado en su victoria; el pueblo que sabe que entrará conmigo a La Moneda el 4 de noviembre de este año.
Quiero destacar que nuestros adversarios de la Democracia Cristiana han reconocido en una declaración la victoria popular. No le vamos a pedir a la Derecha que lo haga. No lo necesitamos. No tenemos ningún ánimo pequeño en contra de ella. Pero ella no será capaz jamás de reconocer la grandeza que tiene el pueblo en sus luchas, nacida de su dolor y de su esperanza.
Nunca, como ahora, sentí el calor humano; y nunca, como ahora, la Canción Nacional tuvo para ustedes y para mí tanto y tan profundo significado. En nuestro discurso lo dijimos:
somos los herederos legítimos de los padres de la patria, y juntos haremos la segunda independencia: la independencia económica de Chile.
Ciudadanas y ciudadanos de Santiago, trabajadores de la patria: ustedes y sólo ustedes son los triunfadores. Los partidos populares y las fuerzas sociales han dado esta gran lección, que se proyecta más allá, reitero, de nuestras fronteras materiales.
Les pido que se vayan a sus casas con la alegría sana de la limpia victoria alcanzada. Esta noche, cuando acaricien a sus hijos, cuando busquen el descanso, piensen en el mañana duro que tendremos por delante, cuando tengamos que poner más pasión, más cariño, para hacer cada vez más grande a Chile, y cada vez más justa la vida en nuestra patria.
Gracias, gracias, compañeras. Gracias, gracias compañeros. Ya lo dije un día. Lo mejor que tengo me lo dio mi partido,. la unidad de los trabajadores y la Unidad Popular.
A la lealtad de ustedes, responderé con la lealtad de un gobernante del pueblo; con la lealtad del compañero Presidente.